OVHcloud ha anunciado el lanzamiento de su nueva herramienta Environmental Impact Tracker, una evolución de su calculadora de carbono presentada en 2023. Esta actualización mejora la medición del impacto ambiental de sus servicios cloud y amplía su alcance a nuevos productos y métricas.
La compañía francesa, especializada en infraestructuras digitales, consolida así su estrategia de análisis medioambiental a través de una plataforma accesible para clientes de todo el mundo, salvo en Estados Unidos.
La herramienta permite calcular con mayor precisión las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por el uso de productos como Bare Metal, Hosted Private Cloud y Public Cloud Compute, con previsiones de incluir próximamente también Public Cloud Storage y Web Hosting. Según los datos de un estudio realizado por la consultora IJO en diciembre de 2024, el Environmental Impact Tracker está entre las soluciones más completas del mercado en cuanto a seguimiento de emisiones asociadas al uso del cloud. Fuente: IJO.
Datos detallados y análisis por fases del ciclo de vida
La versión mejorada incorpora un enfoque basado en los tres alcances definidos por el Protocolo de Gases de Efecto Invernadero (GEI), cubriendo tanto las emisiones directas como las indirectas vinculadas a la producción, operación y cadena de suministro. Esta metodología se apoya en un análisis completo del ciclo de vida de los componentes utilizados, desde su fabricación hasta el fin de su utilización.
La medición contempla tanto los factores de emisión medios de los países en los que opera OVHcloud como los específicos de sus proveedores energéticos. Asimismo, se tiene en cuenta el reacondicionamiento de componentes durante la fase de montaje, un aspecto que permite afinar el cálculo del impacto ambiental y reconocer el peso de los procesos internos en la huella global del servicio cloud.
Incorporación de nuevos indicadores ambientales
El grupo ha anunciado que integrará próximamente en el Environmental Impact Tracker otros criterios ambientales, más allá de los relacionados con los GEI. Entre ellos figuran el uso del agua, los recursos abióticos y el impacto sobre el uso del suelo. Estos indicadores permitirán una evaluación más exhaustiva de los efectos medioambientales asociados al funcionamiento de las infraestructuras digitales, alineando la herramienta con modelos multicriterio utilizados en análisis de sostenibilidad avanzada.
Grégory Lebourg, director global de medioambiente en OVHcloud, ha señalado que “evaluar de forma precisa y transparente la huella ambiental ya no es una opción, sino una responsabilidad”, subrayando que esta herramienta responde a la necesidad de ofrecer a los clientes datos comprensibles y verificables sobre el impacto medioambiental de sus infraestructuras digitales.
Integración en el ecosistema OVHcloud
La herramienta está disponible a través del OVHcloud Manager y también mediante una API específica. Actualmente, se encuentra operativa para clientes globales —excepto en el mercado estadounidense— y se irá ampliando progresivamente con nuevos servicios y métricas. Public Cloud Compute ya está disponible, y se espera que las opciones relacionadas con Storage, Web Hosting y el soporte para análisis multicriterio se incorporen a lo largo del segundo semestre de 2025.
Indicadores de sostenibilidad en el sector cloud
OVHcloud mantiene desde hace más de dos décadas una política industrial orientada a la eficiencia energética, respaldada por el uso de tecnologías como el watercooling y un modelo de integración vertical que le permite optimizar el rendimiento de sus centros de datos. Según datos proporcionados por la propia empresa, sus instalaciones registran algunos de los valores más bajos de Power Usage Effectiveness (PUE) y Water Usage Effectiveness (WUE) del sector.
En la evaluación de sostenibilidad corporativa llevada a cabo por S&P Global Ratings a principios de 2025, la compañía se situó dentro del 16 % de mejor desempeño en su categoría. Este resultado se enmarca en su objetivo de aumentar la trazabilidad y control sobre los efectos medioambientales de la computación en la nube, un área en la que la transparencia y la disponibilidad de métricas verificables están ganando peso en los criterios de selección tecnológica de empresas e instituciones.
Evolución del marco normativo y exigencias del mercado
El desarrollo de herramientas como el Environmental Impact Tracker responde también a las crecientes exigencias regulatorias en materia de sostenibilidad y a la presión de los clientes corporativos por contar con proveedores que puedan acreditar de forma objetiva su impacto ambiental. Las iniciativas europeas en el marco del Green Deal y los reglamentos de taxonomía ambiental refuerzan este tipo de desarrollos, en particular en el sector de las infraestructuras digitales, cuya huella ecológica es objeto de análisis por parte de instituciones reguladoras.
El avance hacia modelos de medición multicriterio también se alinea con recomendaciones de organismos como la Agencia Europea de Medio Ambiente, que abogan por enfoques holísticos para la evaluación del impacto ecológico de servicios digitales.
