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Microsoft separa Teams de Office 365 tras acuerdo con la Comisión Europea

Microsoft separa Teams de Office 365 tras acuerdo con la Comisión Europea

  • La Comisión Europea hace vinculantes los compromisos de Microsoft para separar Teams de Office 365 y Microsoft 365, en respuesta a preocupaciones sobre competencia.La Comisión Europea hace vinculantes los compromisos de Microsoft para separar Teams de Office 365 y Microsoft 365, en respuesta a preocupaciones sobre competencia.
Teresa Ribera

La Comisión Europea ha aceptado los compromisos ofrecidos por Microsoft para resolver sus preocupaciones en materia de competencia respecto a la integración de Teams en sus paquetes de productividad Office 365 y Microsoft 365, compromisos que desde ahora serán legalmente vinculantes bajo las normas antimonopolio de la Unión Europea.

Microsoft deberá ofrecer Office sin Teams a un precio reducido

La decisión de la Comisión responde a la preocupación de que Microsoft, al vincular Teams —su herramienta de comunicación y colaboración— con sus aplicaciones de productividad más utilizadas (como Word, Excel, PowerPoint y Outlook), estaría restringiendo la competencia en el mercado de software empresarial en la nube. La Comisión considera que esta práctica pudo haber dado a Teams una ventaja indebida frente a soluciones rivales.

Como parte de los compromisos aceptados, Microsoft deberá:

  • Comercializar en el Espacio Económico Europeo versiones de Office 365 y Microsoft 365 sin Teams y a un precio inferior al de las versiones que lo incluyen.
  • Permitir que los clientes con licencias de larga duración puedan migrar a las versiones sin Teams.
  • Ofrecer interoperabilidad efectiva con productos de terceros que compiten con Teams, incluyendo la posibilidad de integrar sus aplicaciones en el ecosistema de Microsoft.
  • Facilitar a los clientes la exportación de los datos de Teams, favoreciendo así la portabilidad hacia soluciones alternativas.

Abuso de posición dominante y limitaciones a la interoperabilidad

La Comisión abrió una investigación formal en julio de 2023, tras una denuncia presentada por Slack Technologies, propiedad de Salesforce. Posteriormente, en junio de 2024, la empresa alemana alfaview GmbH presentó una segunda denuncia. Ambas compañías acusaban a Microsoft de utilizar su posición dominante en el mercado de aplicaciones de productividad en la nube para favorecer de forma desleal a Teams frente a otras herramientas.

La investigación preliminar concluyó que Microsoft mantenía una posición dominante en el mercado global de software de productividad SaaS (Software como Servicio) para uso profesional. Desde abril de 2019, la empresa habría incurrido en una práctica de vinculación ilegal (tying), al incluir Teams por defecto en sus paquetes empresariales.

La Comisión también identificó que la falta de interoperabilidad entre los productos de Microsoft y las herramientas competidoras reforzaba esta ventaja, dificultando la entrada de nuevos operadores y consolidando el modelo centrado en suites del fabricante.

Cambios iniciales insuficientes y revisión tras prueba de mercado

En 2023 y 2024, Microsoft introdujo algunos cambios voluntarios, como la comercialización de paquetes sin Teams. Sin embargo, la Comisión consideró que esas modificaciones no eran suficientes para eliminar los efectos de la vinculación anticompetitiva.

Entre el 16 de mayo y el 16 de junio de 2025, la Comisión realizó una consulta pública para evaluar la idoneidad de los compromisos iniciales. A raíz del resultado de esta prueba de mercado, Microsoft presentó una propuesta revisada que incluyó:

  • Aumento del 50% en la diferencia de precio entre las versiones con y sin Teams en varios paquetes empresariales.
  • Obligación de mostrar en sus páginas web corporativas las versiones equivalentes sin Teams junto a las que lo incluyen.
  • Publicación de información técnica sobre interoperabilidad y portabilidad de datos en sus portales para desarrolladores.

Además, Microsoft anunció por su cuenta que aplicará estos cambios a nivel global y extenderá la disponibilidad de versiones sin Teams también para trabajadores de primera línea, con una reducción adicional de precios para estos segmentos.

Supervisión de cumplimiento y duración de los compromisos

Los compromisos tendrán una vigencia de siete años, con excepción de los relativos a interoperabilidad y portabilidad de datos, que se mantendrán durante diez años. La aplicación de las medidas será supervisada por un fideicomisario de vigilancia independiente, encargado de mediar en disputas entre terceros y Microsoft, y de emitir informes periódicos a la Comisión.

En caso de incumplimiento, la Comisión podrá imponer una multa de hasta el 10% del volumen de negocio mundial de Microsoft, o una sanción diaria del 5% de su facturación diaria.

Ambas denunciantes, Slack Technologies y alfaview GmbH, retiraron sus reclamaciones tras las últimas modificaciones introducidas por Microsoft y la aceptación oficial por parte de la Comisión.

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Perspectiva del Ejecutivo comunitario

La vicepresidenta ejecutiva para la Transición Limpia, Justa y Competitiva, Teresa Ribera, afirmó que “con la decisión de hoy, se hacen vinculantes durante al menos siete años los compromisos de Microsoft para poner fin a prácticas de vinculación que podrían estar impidiendo a sus rivales competir eficazmente con Teams”. Ribera señaló también que esta medida “abre la competencia en un mercado crucial y garantiza que las empresas puedan elegir libremente la herramienta de comunicación y colaboración que mejor se adapte a sus necesidades”.

Referencias normativas y contexto regulador

La medida se ampara en el artículo 9(1) del Reglamento 1/2003, que permite a la Comisión aceptar compromisos ofrecidos por las empresas para resolver posibles infracciones del derecho de la competencia, sin necesidad de declarar una infracción formal. También se aplica el artículo 102 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), que prohíbe el abuso de posición dominante en el mercado interior.

Este tipo de procedimientos permite a la Comisión actuar de forma preventiva para restaurar la competencia sin recurrir a sanciones, aunque mantiene la capacidad de imponerlas si las empresas incumplen los compromisos aceptados.

Evaluación del impacto en el sector tecnológico

La decisión de la Comisión podría marcar un precedente para otras plataformas que integran productos de forma conjunta en sus servicios SaaS. Además, pone de manifiesto la atención creciente de las autoridades europeas hacia las prácticas comerciales de grandes proveedores tecnológicos en mercados estratégicos como el software empresarial en la nube.

El seguimiento del cumplimiento será clave para determinar si estas medidas efectivamente permiten una competencia más abierta en el mercado europeo de herramientas de colaboración digital.

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