Durante años, el roaming internacional ha sido una de las fricciones más persistentes para quienes viajan con frecuencia. Tarifas opacas, costes desproporcionados y una experiencia fragmentada entre países han configurado un modelo que, aunque tolerado, rara vez ha sido defendido por los usuarios. Holafly, una scale-up con sede en España y presencia global, ha decidido intervenir en ese statu quo con una propuesta que, al menos en términos técnicos, elimina la necesidad del roaming tal como se ha conocido hasta ahora.
La compañía ha anunciado el lanzamiento de Holafly Plans, un plan de datos global que se gestiona desde una única eSIM permanente en el dispositivo del usuario. El servicio permite activar, ampliar o reducir el plan de datos en función de las necesidades del viajero, sin cambiar de tarjeta ni firmar contratos adicionales. Según datos de la propia empresa, Holafly ya ha activado más de 12 millones de eSIM en más de 200 destinos desde su fundación en 2017.
El anuncio llega en un momento de madurez para el mercado de las eSIM, impulsado por la adopción creciente de dispositivos compatibles y por la presión de los consumidores por soluciones más transparentes. De acuerdo con cifras internas, Holafly ha generado más de 500 millones de dólares en ingresos desde el inicio de la pandemia, consolidando su presencia en Europa y Latinoamérica, y ahora busca ampliar su alcance a Estados Unidos y Canadá.
“Con Holafly Plans no estamos presentando un producto más, estamos creando una nueva categoría”, afirma Pedro Maiquez, cofundador de la compañía. “Por primera vez, un viajero puede tener un único plan instalado siempre en su móvil, con la libertad de disminuir o ampliar su plan de datos cuando lo necesite”. La propuesta se dirige a un perfil de usuario cada vez más frecuente: nómadas digitales, profesionales en movilidad o emprendedores que trabajan desde múltiples ubicaciones sin una base fija.
Aunque el concepto de datos globales no es nuevo, la implementación práctica ha estado limitada por acuerdos entre operadores, restricciones regulatorias y barreras técnicas. Holafly intenta sortear esas limitaciones con una arquitectura basada en acuerdos mayoristas y una interfaz de gestión propia. El resultado es un modelo que, al menos en apariencia, permite al usuario operar con una sola eSIM en cualquier parte del mundo, sin depender de redes locales o tarifas de itinerancia.
La iniciativa también refuerza la división Holafly for Business, orientada a empresas con equipos distribuidos internacionalmente. En sectores como sanidad, movilidad o ingeniería, donde los desplazamientos frecuentes son estructurales, el control de costes en conectividad se ha convertido en una necesidad operativa. Algunas compañías ya han adoptado el servicio como parte de sus políticas de movilidad, aunque la firma no ha revelado nombres concretos.
El movimiento de Holafly se produce en un contexto de transformación más amplia del mercado de telecomunicaciones móviles. La eliminación del roaming dentro de la Unión Europea en 2017 fue un primer paso, pero fuera del bloque comunitario, las tarifas siguen siendo una fuente habitual de quejas. En contraste con las ofertas tradicionales, que suelen implicar contratos de larga duración o paquetes limitados, Holafly apuesta por un modelo de suscripción mensual con datos ilimitados.
La propuesta no está exenta de desafíos. La gestión de calidad de servicio en redes ajenas, la atención al cliente en múltiples idiomas y la adaptación a marcos regulatorios diversos son factores que pueden tensionar el modelo. Además, la competencia en el mercado de eSIM se ha intensificado, con operadores tradicionales y nuevos actores digitales disputando cuota en un segmento que aún está lejos de alcanzar su techo.
Sin embargo, el enfoque de Holafly apunta a una tendencia estructural: la desvinculación entre conectividad y territorio. A medida que más profesionales adoptan estilos de vida móviles, la demanda de soluciones que no dependan de la geografía ni de contratos nacionales gana peso. En ese sentido, Holafly Plans no solo responde a una necesidad técnica, sino también a una expectativa cultural.
Desde su fundación por Pedro Maiquez y YingYan Hu, la compañía ha apostado por un crecimiento sostenido basado en la experiencia del usuario y la expansión progresiva de su red de cobertura. Con una calificación de 4,5 sobre 5 en Trustpilot y más de 10 millones de usuarios, Holafly se ha consolidado como uno de los referentes en el mercado global de eSIM para viajeros. Su reto ahora pasa por mantener esa posición en un entorno cada vez más competitivo y regulado.
La eliminación del roaming como concepto no es solo una cuestión técnica. Implica también una redefinición de cómo se concibe la conectividad en un mundo donde las fronteras físicas no siempre coinciden con las digitales. Holafly, con su nuevo plan global, se posiciona en ese cruce de caminos. El mercado dirá si el modelo es sostenible más allá del entusiasmo inicial.
