La celebración conjunta de Food 4 Future – Expo FoodTech y Pick&Pack for Food Industry en Bilbao ha convertido en 2025 a España en sede de uno de los foros europeos de innovación alimentaria. Durante tres días, la convocatoria atrajo a más de 8.500 profesionales, 379 expertos nacionales e internacionales y alrededor de 250 firmas expositoras.
Contribuyeron a definir un decálogo de tendencias que servirá de hoja de ruta para la transformación de la industria, centrada en la gestión de datos, el desarrollo de tecnologías aplicadas y la colaboración intersectorial. Gracias al conocimiento compartido por los principales actores de la cadena de valor, se establecieron prioridades en materia de inversión y colaboración abierta.
Inteligencia artificial como motor del cambio
La inteligencia artificial (IA) actúa como tecnología transversal a lo largo de la cadena agroalimentaria. Se aplica en la predicción de cosechas, en la automatización de procesos industriales y en la optimización de la logística. Empresas como Eurecat y UMYNO Solutions presentaron soluciones basadas en gemelos digitales, aprendizaje automático y plataformas conectadas a sistemas ERP que han alcanzado una reducción del consumo energético del 40% y una caída del 35% en las emisiones de CO₂.
Estas aplicaciones permiten anticipar variaciones en la producción y ajustar la distribución en tiempo real, mejorando la eficiencia y la resistencia de los modelos de negocio. La interoperabilidad entre plataformas y la escalabilidad de los algoritmos fueron identificadas como desafíos clave durante las sesiones técnicas.

Robótica y automatización en el sector alimentario
La robótica inteligente se extiende desde la agricultura de precisión hasta la logística interna de las plantas de producción. En el campo, sensores y brazos robóticos analizan en tiempo real las condiciones de los cultivos, facilitando el uso eficiente de recursos y la toma de decisiones agronómicas. En el entorno industrial, tecnologías como XPlanar de Beckhoff Automation, basada en levitación magnética, posibilitan el desplazamiento de objetos sin fricción, lo que reduce el desgaste mecánico y contribuye a la eficiencia energética.
Además, la fabricación aditiva o impresión 3D para repuestos acelera las intervenciones de mantenimiento y minimiza los costes logísticos. Los expositores destacaron también la capacidad de los sistemas robóticos para adaptarse a cultivos diversos y entornos variables, lo que amplía su aplicabilidad.

Sostenibilidad 360º: integración de indicadores
El concepto de sostenibilidad ha evolucionado hacia una transformación sistémica que combina indicadores económicos, sociales y medioambientales. Herramientas como Envirodigital, desarrollada por AZTI, miden el impacto ambiental de un producto a lo largo de todo su ciclo de vida basándose en la metodología europea Product Environmental Footprint (PEF). Este software evalúa 16 categorías ambientales, identifica puntos críticos y propone estrategias de ecodiseño.
Entre los casos analizados, McCain aspira a emplear agricultura regenerativa al 100% en 2030, PepsiCo opera una planta de emisiones cero en Etxabarri y cooperativas como Kaiku y COVAP incorporan buenas prácticas ganaderas para reducir su huella. Asimismo, se analizó la evolución de las metodologías de cálculo de la huella de carbono y la necesidad de homogeneizar criterios a escala internacional.
Transparencia y trazabilidad total
Garantizar la autenticidad de los alimentos y reducir el riesgo de fraudes es un imperativo del sector. Tecnologías como blockchain, etiquetas inteligentes, códigos QR dinámicos y sistemas de geolocalización registran cada etapa del producto desde el origen hasta el punto de venta. Carrefour ya puso en marcha un sistema blockchain para productos frescos y plataformas como OpenSC y Provenance facilitan el acceso a estas herramientas. La trazabilidad total refuerza la confianza del consumidor y representa un elemento diferenciador en mercados con altos niveles de exigencia. El registro en tiempo real de parámetros ambientales y de transporte fortalece la respuesta ante alertas sanitarias y facilita la gestión de retiradas de producto.
Talento y cultura empresarial como motor de cambio
La transformación digital y sostenible exige perfiles especializados en robótica, inteligencia artificial y análisis de datos, un recurso que escasea en la industria alimentaria. En Expo FoodTech 2025 se subrayó la necesidad de construir culturas empresariales flexibles y alineadas con los valores de las nuevas generaciones. Retener talento implica ofrecer proyectos con propósito, oportunidades de crecimiento y entornos de confianza. En este sentido, varios ponentes destacaron la urgencia de programar acciones formativas desde etapas tempranas, para atraer vocaciones STEM al sector agroalimentario.
Ecosistemas de innovación abierta
Los modelos de innovación abierta y de cocreación se consolidan como vías eficaces para acelerar el desarrollo de soluciones. El Sandbox AgriFoodTech, iniciativa que reúne a startups, centros tecnológicos y empresas, ofrece acompañamiento técnico, recursos y orientación al mercado. Este escenario de prueba favorece la experimentación a pequeña escala y facilita la integración de prototipos viables en la cadena de valor. La flexibilidad de estos ecosistemas permite iterar prototipos en condiciones reales y validar su impacto antes de su despliegue comercial.
Nuevas proteínas y fermentación de precisión
La biotecnología impulsa alternativas a las proteínas convencionales mediante fermentación de precisión, cultivo celular o el uso de ingredientes como hongos, algas o Rubisco. Centros como AZTI trabajan en el desarrollo de productos que igualan en sabor y textura a los tradicionales, pero con una huella ambiental reducida. Durante las presentaciones se expusieron datos comparativos sobre la eficiencia de materia prima, con reducciones de uso de agua de hasta el 90% frente a la ganadería convencional. Estas innovaciones responden a una demanda creciente de opciones con mayor eficiencia de recursos y abren la vía a formatos alimentarios más éticos y accesibles.
Nutrición personalizada para una salud proactiva
La convergencia de datos genéticos, microbiota, inteligencia artificial y sensores permite diseñar dietas adaptadas al perfil genético y al estilo de vida de cada individuo. Startups y centros tecnológicos presentan plataformas que analizan parámetros biológicos para recomendar pautas alimentarias capaces de prevenir enfermedades crónicas y promover un envejecimiento activo. Según los estudios de EIT Food, para 2050 el 30% de la población europea superará los 65 años, por lo que estas propuestas orientadas a la salud preventiva se anticipan como un componente clave de los sistemas sanitarios. Se discutió también la integración de estos servicios con las aplicaciones de salud digital y las plataformas de telemedicina.
Packaging que informa, conserva y conecta
El envase evoluciona para cumplir múltiples funciones: preservar la calidad, comunicar información relevante y cerrar ciclos de materiales. En Pick&Pack 2025 se mostraron etiquetas inteligentes, materiales biodegradables y envases comestibles. Estas soluciones proporcionan datos al consumidor sobre origen, caducidad y condiciones de conservación, mientras que optimizan el uso de recursos y facilitan la cadena de reciclaje. Además, se debatió sobre la estandarización de códigos de identificación y su integración con aplicaciones móviles para mejorar la trazabilidad del envase. El informe del Consumer Observatory de EIT Food revela que un 51% de los europeos prioriza opciones saludables y sostenibles.
Logística inteligente y resiliente
La digitalización de la cadena de suministro incorpora sensores en la trazabilidad de la cadena de frío, analítica predictiva e IA para diseñar rutas dinámicas. Estas herramientas permiten reducir mermas, minimizar emisiones y garantizar la seguridad alimentaria. Pick&Pack for Food Industry 2025 presentó casos de éxito en los que la digitalización logística ha incrementado la competitividad de las empresas y ha demostrado capacidad de adaptación frente a crisis sanitarias y tensiones geopolíticas, configurando un modelo de gestión de interrupciones más efectivo. También se abordaron los retos de ciberseguridad asociados a la conectividad de la cadena de suministro y la protección de datos sensibles.
Hitos y desafíos para el futuro del sector alimentario
La hoja de ruta definida en Bilbao sintetiza los retos inmediatos y los avances previstos en la transformación del sector. El despliegue de la IA y la robótica exige infraestructuras digitales y protocolos de interoperabilidad; la sostenibilidad 360º reclama datos fiables y colaboración público-privada; y el desarrollo de proteínas alternativas requiere marcos regulatorios claros. La combinación de estos elementos, junto con la formación de talento especializado, los ecosistemas de innovación abierta y la coordinación de organismos públicos, centros de investigación y empresas privadas, se perfila como elemento determinante para consolidar estos avances.
