Hewlett Packard Enterprise (HPE) ha presentado una nueva identidad de marca coincidiendo con la celebración de su décimo aniversario, en un movimiento que subraya su evolución como actor tecnológico centrado en inteligencia artificial, infraestructuras digitales y servicios de nube híbrida. El rediseño incluye un logotipo renovado, ajustes en la identidad visual y un enfoque digital optimizado, según ha comunicado la empresa el 15 de julio en Madrid.
La nueva imagen corporativa de HPE responde al contexto de crecimiento en áreas como la computación de alto rendimiento y la inteligencia artificial generativa. Según datos de la propia compañía, HPE gestiona seis de los diez superordenadores más potentes del mundo, incluido El Capitan, que ocupa el primer puesto del ranking global actual. Este posicionamiento la sitúa como proveedor de referencia en el desarrollo de plataformas avanzadas para clientes institucionales e industriales.
La vicepresidenta ejecutiva y directora de Marketing y Comunicación de HPE, Jennifer Temple, destacó que esta transformación busca mostrar con mayor claridad “quién es hoy HPE, cómo trabajan sus equipos y el impacto que generan sus soluciones en diversos sectores”. En declaraciones recogidas en la nota de prensa, Temple puso como ejemplo el papel de la compañía en tecnologías aplicadas a la conducción autónoma y la investigación médica, ámbitos donde la capacidad de procesamiento y el análisis de datos son clave.
Un rediseño orientado al entorno digital y al cliente corporativo
La nueva identidad gráfica mantiene el característico color verde de HPE, pero introduce una tipografía revisada, un logotipo más depurado y una reinterpretación del llamado “Elemento”, símbolo visual de la marca. Este rediseño se acompaña de una experiencia digital más intuitiva, enfocada a mejorar la interacción con clientes y socios.
En paralelo, HPE ha renovado la identidad visual de GreenLake, su plataforma para cargas de trabajo híbridas. La compañía ha señalado que estos cambios buscan reflejar un enfoque más centrado en la escalabilidad, la integración de soluciones y la respuesta a necesidades específicas de negocio.
De escisión empresarial a proveedor de infraestructuras avanzadas
Desde su creación en 2015 como resultado de la separación de Hewlett-Packard Company, HPE ha centrado su actividad en ofrecer soluciones tecnológicas para organizaciones públicas y privadas. En estos diez años, su estrategia ha girado en torno a la computación distribuida, el almacenamiento de datos, la conectividad segura y, más recientemente, los entornos cloud basados en inteligencia artificial.
El relanzamiento de la marca, según la compañía, no implica únicamente un cambio estético, sino una reafirmación de los principios fundacionales heredados del modelo original de Silicon Valley. El mensaje corporativo insiste en la importancia de la innovación tecnológica y la colaboración como vectores para afrontar retos de gran escala.
Impacto en el posicionamiento de marca
El nuevo diseño se presentó junto a un vídeo explicativo y materiales que muestran la actualización de los distintos elementos gráficos. Aunque el logotipo y la iconografía han sido simplificados, la empresa ha mantenido elementos reconocibles para garantizar coherencia y continuidad con su trayectoria anterior.
Este tipo de renovaciones suelen buscar también una mayor claridad visual en medios digitales, entornos móviles y soportes multimedia, áreas en las que HPE ha reforzado su presencia comercial. Si bien no se han detallado cifras asociadas a esta campaña de rebranding, el movimiento se enmarca en una estrategia de consolidación frente a otros proveedores de servicios en la nube y tecnología de IA.
Perspectivas de futuro y contexto del mercado
El cambio de identidad se produce en un momento en que el mercado empresarial está acelerando la adopción de sistemas basados en inteligencia artificial, lo que implica nuevas exigencias en términos de capacidad de cómputo, eficiencia energética y gobernanza de datos. Empresas como HPE, con infraestructuras de supercomputación y plataformas híbridas, buscan posicionarse como actores relevantes en esta transición.
En los próximos meses, está previsto que HPE continúe adaptando sus canales y recursos corporativos a esta nueva imagen, incluyendo páginas web, documentación técnica y herramientas comerciales. El objetivo declarado es facilitar la identificación de marca en mercados globales y reforzar su presencia entre clientes estratégicos en sectores como defensa, sanidad, telecomunicaciones e industria.
Actualización visual y continuidad estratégica
A pesar de los cambios visuales, la compañía no ha modificado su estructura organizativa ni ha anunciado variaciones en su cartera principal de productos y servicios. El nuevo logotipo y sus elementos asociados se implementarán de forma progresiva en los distintos activos digitales y físicos de la marca.
Este reposicionamiento coincide además con una etapa de fuerte inversión en soluciones basadas en inteligencia artificial y edge computing, donde HPE ha reforzado alianzas con entidades públicas y privadas para impulsar nuevos modelos de procesamiento distribuido.
