Diez años después de la separación de HP Inc., Hewlett Packard Enterprise abre un nuevo ciclo con una mezcla llamativa de elementos: una identidad corporativa actualizada, una reorganización profunda del porfolio y un giro decidido hacia las redes como eje estructural de crecimiento.
En un encuentro con la prensa tecnológica celebrado en Madrid, en el que participó La Ecuación Digital, Alfredo Yepez, máximo responsable de HPE en España y Sur de Europa, y Álvaro Morán, líder de HPE Networking en España, expusieron en detalle las implicaciones de esta transición y los resultados del ejercicio fiscal 2025.
Los resultados del ejercicio revelan que el año fiscal concluyó con ingresos de 34.300 millones de dólares, un crecimiento del 14% interanual. Aunque la cifra incorpora cuatro meses de contribución de Juniper Networks, Yepez apuntó que incluso sin ese efecto el crecimiento habría sido coherente con las previsiones comprometidas. Esa puntualización ayuda a interpretar la magnitud real del salto: el impulso no proviene solo de la adquisición, sino también de la aceleración de IA, servidores de nueva generación y software en modelo de consumo.
La conjunción entre los diez años de HPE y la integración de Juniper sirve, en palabras de Yepez, como un punto de inflexión. El nuevo branding pretende reflejar esa ambición: una compañía capaz de reposicionarse hacia un mercado donde la red vuelve a ocupar un papel que había perdido frente al cómputo y el cloud, pero que la explosión de la inteligencia artificial ha devuelto al centro de gravedad tecnológica.
Una hoja de ruta a tres años: redes, IA, software y servidores de próxima generación
Las prioridades estratégicas para el periodo 2026–2028 aparecen claramente definidas en la presentación interna. HPE quiere “construir un nuevo líder del sector networking”, “capturar el crecimiento de la infraestructura de IA de forma rentable” y “acelerar el crecimiento de software y servicios de alto margen con GreenLake”. Son objetivos amplios, pero cada uno responde a tensiones detectadas en el mercado.
En el caso de la apuesta por redes no se limita a absorber el negocio previo de Juniper. En realidad, introduce un matiz diferente: la creación de un porfolio unificado que combina propiedad intelectual de Aruba y Mist. La compañía también sitúa como prioridad el almacenamiento con propiedad intelectual propia, concentrada ahora en la plataforma Alletra MP. El mensaje no se dirige solo a los clientes; también interpela a los analistas, que durante años han comparado a HPE con competidores cuyo margen en almacenamiento dependía menos de software de terceros.
La transición a los nuevos procesadores —que sufre un impacto por la disponibilidad limitada de chips y por la rapidez de los ciclos de innovación de Nvidia— obliga a un ajuste continuo entre coste, rendimiento y tiempos de entrega. HPE sostiene que su capacidad para absorber estas fluctuaciones mejora con un modelo de ingresos recurrentes más sólido: el ARR supera ya los 3.200 millones de dólares, con un crecimiento del 62% interanual y más de 46.000 clientes en GreenLake .
Aunque esta cifra podía interpretarse como un simple indicador comercial, Yepez la conectó con un asunto financiero menos visible: el impacto que generan los proyectos de IA de gran escala en el capital circulante. Son operaciones intensivas en materiales, con plazos de fabricación de 10 a 12 meses y cláusulas contractuales que deben proteger al proveedor ante cambios de generación de GPUs. El ARR, más que un dato de suscripción, opera aquí como una red de seguridad que amortigua la volatilidad de la facturación.
Resultados 2025: crecimiento, combinación de negocios y presión por márgenes sostenibles
Los datos fiscales del ejercicio, reflejados en las láminas corporativas, muestran un año complejo pero positivo. Networking alcanzó 6.900 millones de dólares, un 51% más que el año anterior, impulsado por la incorporación parcial de Juniper y por un aumento de doble dígito en campus y branch gracias a la combinación de Aruba y Mist . El negocio de servidores, pese a registrar una caída del 5% en ingresos en el cuarto trimestre, logró recuperar su margen operativo hasta el 9,8%, prácticamente el umbral marcado por la dirección.
Uno de los vectores más significativos del año fue la evolución del backlog de IA. Los pedidos acumulados superan los 11.500 millones de dólares, con una curva ascendente que se intensifica en 2024 y 2025, especialmente en servicios soberanos y proyectos de gran escala para entrenamiento de modelos . Sin embargo, la facturación no avanza al mismo ritmo; un desfase que Yepez explicó con detalle al describir la complejidad logística de estas plataformas.
El área de almacenamiento, por su parte, experimentó un rediseño profundo con Alletra MP, que unifica la gestión de datos estructurados y no estructurados sobre una sola arquitectura. Más de 7.400 unidades enviadas durante el año —el doble que en 2024— y un crecimiento de doble dígito en pedidos cada trimestre confirman la tracción de esta línea .
En conjunto, estos movimientos dibujan un patrón: una empresa que combina adquisiciones, optimización interna y revisión de márgenes mientras busca equilibrar tres presiones simultáneas —clientes que demandan IA, proveedores de chips que ajustan suministro y accionistas que esperan retornos crecientes.
El giro hacia redes: la visión de Álvaro Morán y la polinización cruzada
La irrupción de Álvaro Morán como responsable de HPE Networking en España introduce una narrativa complementaria: la construcción de una red segura impulsada por IA y, al mismo tiempo, diseñada para sostener las cargas de IA. La presentación describe esta doble función con claridad: “purpose-built with AI and for AI” .
Lo interesante es que Morán no se limitó a enumerar productos; dedicó buena parte de su intervención a explicar el concepto de polinización cruzada. Un término más habitual en innovación o diseño organizacional que en ingeniería de redes, y que HPE adopta para describir la integración progresiva de tecnologías de Aruba y Juniper sin cancelar ninguno de sus roadmaps.
El ejemplo más directo apareció en Discover: un punto de acceso WiFi capaz de operar tanto con Mist como con Central, previsto para lanzarse en 2026. La clave no es el hardware, sino la convivencia de microservicios de ambos mundos, lo que permite que funciones de análisis basadas en IA —como el agente Marvis o el data lake y los LLM de Central— coexistan sobre una misma plataforma . La idea busca disipar un temor frecuente en integraciones de esta escala: la obsolescencia prematura de productos existentes.
Morán definió la polinización cruzada como una forma de absorber “los mejores elementos de cada sistema para que el resultado sea el mejor posible”, evitando la lógica habitual de sustitución. El enfoque se alinea con la visión que Gartner presenta en su Magic Quadrant, donde Aruba y Juniper aparecen como líderes destacados en capacidad de ejecución y visión en redes empresariales . HPE interpreta esta doble presencia como un punto de partida y no como una duplicación.
AIOps, seguridad y redes para la IA: un marco unificado
El nuevo relato de HPE Networking incorpora tres piezas que, entendidas juntas, permiten comprender mejor el reposicionamiento de la compañía.
1. AIOps y automatización
La empresa insiste en que combina un data lake de gran escala con un enfoque agentic, apuntando a redes capaces de diagnosticar, actuar y anticipar comportamientos. La ambición explícita es acercarse al paradigma del “self-driving network”, un terreno donde Mist ya había ganado visibilidad antes de la adquisición .
2. Seguridad integrada
La arquitectura propuesta combina NAC, SSE, NGFW y SD-WAN bajo un modelo Zero Trust. Morán contrastó este planteamiento con la realidad actual de muchas empresas, donde conviven múltiples herramientas sin intercambio de señales. La presentación finaliza con las “cuatro olas” —Full Stack AIOps, Unified SASE, Universal ZTNA y Hybrid Mesh Firewall— junto con soluciones cripto-agile orientadas a riesgos de computación cuántica .
3. Redes para la IA
El componente quizá más estratégico. HPE quiere posicionarse como proveedor integral para cargas de IA en centros de datos, combinando networking, almacenamiento y cómputo bajo GreenLake. La alianza tecnológica con Nvidia y la infraestructura Helios basada en AMD y estándares OCP amplía el alcance más allá del ecosistema dominante de GPUs, algo no frecuente en un mercado cada vez más polarizado .
Un semestre decisivo para 2026
Las previsiones presentadas sitúan los ingresos del primer trimestre fiscal 2026 entre 9.000 y 9.400 millones de dólares, con márgenes ligeramente crecientes y una fuerte contribución de networking, cuya facturación podría crecer entre un 145% y un 155% interanual en términos reportados, una cifra explicable solo por su integración plena en el perímetro contable .
Yepez insistió en que la estacionalidad del año se verá condicionada por el calendario de entregas de proyectos de IA, que desplazan el reconocimiento de ingresos hacia la segunda mitad del ejercicio. Ese patrón altera los ritmos habituales de la industria, pero el backlog acumulado parece justificarlo.
La empresa también prevé generar entre 1.700 y 2.000 millones de dólares de flujo de caja libre, aumentar dividendos y continuar con programas de recompra de acciones. Un movimiento que combina expansión industrial y retorno a accionistas, algo que no siempre resulta sencillo cuando se atraviesan ciclos de inversión intensivos.
Perspectiva final
El encuentro de Madrid ofreció un retrato poco habitual: una compañía que comunica cambios estructurales mientras intenta explicar simultáneamente sus implicaciones financieras, operativas y tecnológicas. Las novedades de Discover —desde los AP de doble plataforma hasta la integración con Nvidia y los avances en seguridad— adquieren profundidad cuando se observan junto a los resultados del ejercicio y al relato de polinización cruzada que definió Álvaro Morán.
El giro hacia redes de nueva generación, impulsadas por y para la IA, parece situarse como la pieza articuladora de HPE en los próximos años. Aunque la ejecución de esta estrategia dependerá de factores externos —suministro de chips, regulación de IA, competencia en cloud y virtualización—, la compañía se presenta con un portafolio más cohesionado y con un enfoque que combina ambición tecnológica y disciplina financiera.
