La Asociación Española para la Digitalización (DigitalES) ha firmado este martes un convenio con Red.es por valor de 7,5 millones de euros para poner en marcha seis proyectos piloto de tecnologías cuánticas aplicadas en salud, energía y telecomunicaciones.
El acuerdo se enmarca en la Estrategia Nacional de Tecnologías Cuánticas 2025-2030, presentada por el Gobierno el pasado abril, y responde a una convocatoria pública lanzada por Red.es para acelerar la industrialización de capacidades cuánticas en España.
La iniciativa se articula a través del programa DigitalES Quantum, que actuará como catalizador de un hub cuántico nacional. DigitalES, que agrupa a las principales empresas tecnológicas del país, asumirá la coordinación del programa, facilitando la colaboración público-privada y permitiendo que sus empresas asociadas ejecuten los proyectos con un enfoque aplicado y sectorial.
Según explicó Miguel Sánchez Galindo, director general de DigitalES, durante la firma del convenio, el objetivo es trasladar la computación cuántica del laboratorio a la industria. «Aportamos nuestra red de empresas líderes y nuestra capacidad de coordinación sectorial para generar aplicaciones reales con impacto económico y social», señaló.
Los seis proyectos se centran en tres sectores estratégicos. En salud, se desarrollarán modelos cuánticos para mejorar la identificación de variantes genéticas y el análisis de imágenes médicas, así como herramientas para optimizar la gestión de recursos de emergencia. En energía, se trabajará en algoritmos cuánticos para optimizar la planificación integral de la cadena energética y en soluciones de detección temprana de fugas en refinerías mediante análisis termográfico cuántico. En telecomunicaciones, se impulsará un piloto de Quantum Key-as-a-Service para comunicaciones seguras y un sistema de optimización cuántica orientado a reforzar la resiliencia de redes críticas.
Aunque el volumen económico del convenio es limitado en comparación con otras inversiones tecnológicas, su valor reside en la orientación práctica de los casos de uso y en la capacidad de replicación que ofrecen. Según el plan de DigitalES Quantum, los proyectos están diseñados para escalarse a otros sectores y contribuir a consolidar un ecosistema cuántico nacional, en línea con el objetivo CID 457 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).
La computación cuántica, aún en fase incipiente en términos de despliegue industrial, se perfila como una tecnología con potencial disruptivo en ámbitos como la simulación de materiales, la optimización logística o la ciberseguridad. Sin embargo, la falta de talento especializado, la escasa madurez de las infraestructuras y la fragmentación de esfuerzos siguen siendo barreras relevantes. El convenio firmado busca precisamente mitigar estos factores mediante una aproximación coordinada entre empresas, centros de investigación y administraciones públicas.
España, que participa activamente en iniciativas europeas como el Quantum Flagship y el EuroQCI, ha intensificado su apuesta por las tecnologías cuánticas en los últimos dos años. La estrategia nacional presentada en abril contempla inversiones públicas y privadas para posicionar al país como actor relevante en la carrera cuántica global, aunque aún queda por ver cómo se traducirá esta ambición en capacidades industriales sostenibles.
En este sentido, el papel de DigitalES como articulador sectorial cobra especial relevancia. La asociación representa a compañías que generan más de 115.000 empleos directos y suponen el 6% del PIB nacional, lo que le otorga una capacidad de arrastre significativa. El reto, sin embargo, no es menor: convertir el conocimiento científico en soluciones industriales viables, en un contexto donde la competencia internacional es intensa y los plazos de maduración tecnológica son inciertos.
El programa DigitalES Quantum contempla también acciones de formación y transferencia de conocimiento entre industria y academia, con el objetivo de crear una base de talento cuántico en España. Esta dimensión formativa se considera crítica para garantizar la sostenibilidad del ecosistema a medio plazo, más allá de los pilotos iniciales.
«La colaboración entre empresas, centros de investigación y administraciones será determinante para transformar conocimiento en soluciones industriales, reforzar nuestra competitividad y avanzar hacia la autonomía digital», afirmó Sánchez Galindo. La frase resume una aspiración compartida, aunque su concreción dependerá de la ejecución efectiva de los proyectos y de la capacidad del sector para mantener el impulso más allá de esta primera fase.
El convenio entre DigitalES y Red.es no es un punto de llegada, sino un punto de partida. Marca un paso más en la construcción de una infraestructura cuántica aplicada en España, pero también plantea interrogantes sobre la velocidad, la escala y la dirección que tomará este desarrollo en los próximos años.
