La automatización de procesos documentales en el sector medioambiental ha dado un paso significativo con la nueva solución desarrollada por Ecoembes y EY. A partir de ahora, los gestores autorizados podrán subir los Documentos de Identificación (DI) de residuos a una plataforma digital que utiliza inteligencia artificial para extraer y validar automáticamente la información. La iniciativa busca resolver un problema persistente: la heterogeneidad de formatos y calidades en los documentos recibidos, que hasta ahora requería una revisión manual constante.
Según explicó Carlos González, product owner de Ecoembes, la herramienta mejora la calidad del proceso y facilita el trabajo tanto de los gestores como del equipo interno. La clave está en un sistema de Reconocimiento Óptico de Caracteres (OCR) que interpreta documentos en cualquier formato, desde fotografías hasta archivos escaneados, y extrae los datos necesarios para completar los formularios digitales. El resultado es una validación más rápida, con menos intervención humana y mayor trazabilidad.
De acuerdo con EY, que ha colaborado en el desarrollo, la solución no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también prepara a las organizaciones para un entorno regulatorio cada vez más exigente. Rafael Valenzuela Yrazusta, socio responsable de Intelligent Automation en EY España, subraya que la digitalización no es solo una cuestión de eficiencia, sino también de anticipación y competitividad. La herramienta, afirma, permite avanzar hacia modelos más sostenibles y resilientes.
El impacto de esta automatización es tangible. Solo en el caso de los poseedores con gestión integral, Ecoembes tramita unos 85.000 traslados de residuos al año. Muchos de estos documentos no estaban digitalizados, lo que dificultaba su revisión. Con la nueva herramienta, incluso los documentos en papel o formatos no estructurados pueden ser procesados automáticamente. En el proceso de fuera del hogar, que implica 6.300 traslados anuales, se estima que el tiempo de gestión se reducirá a la mitad, y la preparación de la información para validación podría disminuir hasta un 80%.
En el proceso de entradas, que gestiona más de 108.000 traslados al año, la validación manual era inviable. La nueva solución permite una revisión autónoma, lo que representa un cambio estructural en la forma en que se controla el cumplimiento normativo. La herramienta incluye una consola de validación que centraliza toda la información, lo que agiliza la toma de decisiones y mejora la trazabilidad.
Aunque la automatización documental no es nueva, su aplicación en el ámbito de la gestión de residuos presenta particularidades técnicas y regulatorias. La legislación española, regulada por la Ley 7/2022 y el Real Decreto 1055/2022, exige un control exhaustivo de los traslados de residuos. La digitalización de estos procesos no solo reduce la carga operativa, estimada en un 70%, sino que también refuerza la seguridad jurídica del sistema.
La solución desarrollada por Ecoembes y EY es escalable y se enmarca en una estrategia más amplia de transformación digital. Desde 2025, Ecoembes también gestiona los envases comerciales, lo que ha ampliado su ámbito de actuación y ha incrementado la necesidad de herramientas tecnológicas robustas. En 2024, la organización recicló más de 1,5 millones de toneladas de envases, un 5,4% más que el año anterior.
La digitalización de los DI no es solo una mejora operativa. También representa un cambio en la relación entre los gestores de residuos y la administración, al facilitar el cumplimiento de las obligaciones legales y mejorar la calidad de los datos disponibles. La automatización permite, además, detectar errores o inconsistencias de forma más rápida, lo que contribuye a una supervisión más eficaz.
No obstante, la implantación de este tipo de soluciones plantea retos. La calidad de los documentos originales sigue siendo un factor crítico, y aunque el sistema puede interpretar formatos diversos, su rendimiento depende en parte de la nitidez y estructura del archivo. Además, la adopción por parte de los gestores requerirá una fase de adaptación, especialmente para aquellos menos familiarizados con herramientas digitales.
Pese a estas limitaciones, el sistema ya está operativo y se espera que su uso se extienda progresivamente. La iniciativa se alinea con una tendencia más amplia en el sector ambiental: el uso de tecnologías de automatización para mejorar la trazabilidad, reducir costes y responder con agilidad a los cambios normativos. En un entorno donde la presión regulatoria y social sobre la gestión de residuos es creciente, herramientas como esta ofrecen una vía concreta para avanzar hacia modelos más eficientes y transparentes.
