El secretario de Estado de Ciencia, Universidades e Innovación, Juan Cruz Cigudosa García, ha subrayado en la tercera jornada del 39º Encuentro de la Economía Digital y las Telecomunicaciones de AMETIC en Santander que la digitalización no es un reto, sino una obligación ineludible para la competitividad y la cohesión social de España.
Durante su intervención, presentó los avances y compromisos del Gobierno en tecnologías disruptivas, inteligencia artificial, cuántica, neurociencia y salud digital, destacando la inversión pública récord en I+D+i y el crecimiento sostenido del empleo en el sector tecnológico.
Deeptech: capital paciente y transferencia tecnológica
Uno de los anuncios centrales fue la consolidación de la Estrategia Nacional de Deeptech, que busca dar soporte a tecnologías críticas, cercanas a la investigación pero alejadas del mercado, y que requieren capital paciente para madurar y convertirse en soluciones comerciales.
En este marco, se destacó el fondo DeepTech Transfer, presentado en mayo junto con el CDTI y el Fondo Europeo de Inversiones, dotado con 353 millones de euros. Este instrumento pretende cubrir dos déficits estructurales en España: superar el “valle de la muerte” —la fase crítica entre la investigación y el mercado— y acompañar la transferencia científica hacia productos con impacto empresarial.
El secretario de Estado fue claro: España no puede permitirse retrasos en este ámbito. “O ponemos una gobernanza que engrase la llegada de estas tecnologías a la sociedad, o lo tendremos más complicado”, afirmó.
Estrategia cuántica española: inversión y soberanía digital
Otro de los ejes estratégicos es la Estrategia Española de Tecnologías Cuánticas 2025-2030, presentada de forma conjunta con el Ministerio para la Transformación Digital y la Función Pública. El plan contempla 800 millones de euros de inversión pública, con capacidad de atraer hasta 1.500 millones, centrados en áreas clave como la sensórica, la comunicación y la criptografía.
España no solo apuesta por su despliegue interno: el próximo 1 de octubre presentará en Bruselas esta estrategia como modelo de referencia, en un contexto en el que la soberanía digital europea depende en gran medida de su capacidad de liderazgo en el ámbito cuántico.
Inteligencia artificial: de la supercomputación a la investigación interdisciplinar
La inteligencia artificial ocupa un lugar prioritario en la agenda. Cigudosa destacó que el Barcelona Supercomputing Center (BSC) albergará una de las siete fábricas de IA de la Unión Europea, con un claro enfoque en pymes y startups. La inversión conjunta asciende a 176 millones de euros, con aportaciones del Gobierno central (62 millones), la Generalitat de Cataluña (16 millones) y la Joint Undertaking europea EuroHPC (98 millones).
El objetivo es democratizar el acceso a capacidades de cómputo avanzadas para acelerar el desarrollo empresarial. Además, el Ministerio relanzó este año la convocatoria de redes de investigación en IA con 31 millones de euros de fondos propios, tras cancelar la versión inicial vinculada a fondos europeos por problemas administrativos. La respuesta ha sido masiva: 1.000 solicitudes frente a las 200 de la convocatoria original.
Asimismo, se han desplegado 374 contratos en centros públicos de investigación (CSIC, BSC, CNIC y CNIO) por valor de 120 millones de euros, destinados a incorporar IA en procesos científicos.
Salud digital y neurotecnología: impacto social y económico
El secretario de Estado subrayó el papel transformador del PERTE de Salud de Vanguardia, que ya ha movilizado el 98% de sus fondos (2.481 millones de euros) y ejecutado el 82%, con foco en la transformación digital del sistema sanitario y la mejora de la atención al paciente.
En paralelo, anunció la consolidación del Centro Nacional de Neurotecnología (Spain Neurotech), un consorcio entre el Gobierno, la Comunidad de Madrid y la Universidad Autónoma de Madrid, con 120 millones de euros de dotación. Este centro busca posicionar a España en la vanguardia internacional de la neurociencia aplicada a la innovación tecnológica y el emprendimiento.
Inversión récord y crecimiento del empleo digital
Los datos macroeconómicos refuerzan la narrativa de transformación. Según la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), en 2024 se alcanzó el récord histórico de inversión pública en I+D+i y digitalización, con 13.606 millones de euros, lo que supone casi 2.500 millones más que el año anterior.
El empleo digital acompaña esta tendencia: en los últimos siete años, los puestos en programación, consultoría y actividades tecnológicas han crecido un 70%, con más de 200.000 nuevos empleos. Solo en el último año se sumaron 27.000 empleos adicionales, con un crecimiento interanual del 5,6%.
Pese a ello, el déficit de talento digital sigue siendo uno de los principales frenos. “No podemos pescar talento de al lado porque todos estamos igual”, reconoció Cigudosa, reflejando una preocupación compartida en toda la UE.
España como nodo europeo de la revolución digital
La intervención cerró con una visión optimista: la economía digital ya representa el 26% del PIB español en el primer semestre de 2025, consolidando el cambio estructural hacia un modelo basado en innovación, tecnología y colaboración público-privada.
No obstante, Cigudosa alertó de un reto pendiente: la transferencia de conocimiento desde universidades y centros de investigación al mercado. Superar esta brecha será clave para que España pase del quinto puesto en el scoreboard europeo de innovación a posiciones de liderazgo global.
“España tiene cartas para convertirse en un nodo europeo de la revolución digital”, concluyó. Una apuesta que combina inversión, investigación y, sobre todo, la ambición de que la digitalización sea un motor de prosperidad compartida.
