La digitalización del sector público en España avanza con cautela pero con determinación, especialmente en lo que respecta a la adopción de tecnologías en la nube. La nube pública, cuando se implementa bajo un modelo híbrido y con garantías de cumplimiento normativo, se posiciona como una herramienta estratégica para modernizar servicios, mejorar la eficiencia operativa y mantener el control sobre los datos.
Durante el evento celebrado en el IBM Innovation Studio de Madrid, representantes de diversas administraciones públicas compartieron sus experiencias en la adopción de IBM Cloud. El objetivo común: implementar soluciones tecnológicas bajo estrictos marcos de seguridad, interoperabilidad y soberanía del dato.
Nube híbrida como modelo operativo preferente en las AAPP
La nube híbrida abierta, respaldada por tecnologías como Red Hat OpenShift, se está consolidando como la arquitectura de referencia en el ámbito público. Este enfoque permite desplegar cargas de trabajo en entornos públicos y privados según sus requisitos de regulación, escalabilidad y gobernanza.
IBM ha desarrollado su región cloud multizona (MZR) en Madrid con estas necesidades en mente, lo que facilita a organizaciones del sector público operar dentro de marcos como el Esquema Nacional de Seguridad (ENS) o el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
Silvia García, responsable de Multicloud y Servicios Híbridos en Telefónica Tech, explicó que la empresa está utilizando Apptio Cloudability para ofrecer modelos FinOps en entornos multicloud. Esta solución permite a las administraciones públicas monitorizar el consumo financiero en la nube, optimizando los recursos y facilitando la toma de decisiones basada en datos reales.
Casos de uso reales en el sector público español
Varias entidades compartieron cómo están aplicando modelos en la nube para modernizar su funcionamiento. El Instituto Nacional de Administración Pública (INAP), por ejemplo, está utilizando entornos híbridos para equilibrar innovación y gobernanza. “La nube nos permite ofrecer una experiencia más fluida a los usuarios sin perder de vista la gobernanza del dato”, afirmó Daniel Corregidor, integrante del departamento de TI del INAP.
Francisco Pérez, de la consultora tecnológica Seidor, añadió que el proceso de digitalización no es exclusivamente tecnológico. A su juicio, “estamos hablando de una evolución del modelo de prestación de servicios públicos, que requiere implicar a muchas áreas más allá del área TIC”.
Salud, transporte y gestión: ámbitos estratégicos para la nube pública
El ecosistema sanitario también está integrando plataformas cloud para impulsar la interoperabilidad y el análisis de datos. María Eugenia Gas, directora de la Plataforma de Big Data del Instituto de Investigación Sanitaria La Fe, subrayó que “el ecosistema de salud necesita compartir datos para avanzar, pero solo lo puede hacer desde entornos seguros y auditables”.
Por su parte, Renfe Operadora ha optado por una arquitectura distribuida basada en tecnologías de IBM y Red Hat. Esta infraestructura permite ganar en resiliencia operativa y reducir los riesgos asociados a caídas o interrupciones de servicio. Federico García, responsable de arquitectura de sistemas y plataformas cloud en la compañía, indicó que “una arquitectura multicloud bien diseñada nos da el margen para ser más eficientes y resilientes”.
En el caso de la Generalitat de Catalunya, Demetri Rico, gerente del CTTI, recalcó la importancia de mantener una gestión eficaz: “La tecnología cambia, las prioridades cambian, pero lo que permanece es la necesidad de una gestión eficaz y transparente”.
Seguridad y cumplimiento: requisitos no negociables
Uno de los principales retos que afrontan las administraciones públicas es garantizar el cumplimiento regulatorio y la seguridad de los datos. Javier Candau, subdirector general del Centro Criptológico Nacional (CCN), destacó que el cumplimiento del Esquema Nacional de Seguridad debe entenderse como un pilar, no solo como una exigencia técnica: “No solo se debe cumplir, se debe entender. Es la base para garantizar que los servicios digitales públicos sean realmente fiables”.
IBM Cloud integra capacidades que permiten automatizar el cumplimiento de normativas tanto españolas como europeas. Esta funcionalidad es clave para entidades que operan en sectores críticos, desde la sanidad hasta la movilidad.
El papel de IBM como proveedor tecnológico en entornos regulados
IBM se ha posicionado como un actor relevante en el proceso de digitalización del sector público español, proporcionando no solo infraestructura en la nube, sino también marcos metodológicos para su adopción.
Carmen Prada, directora de IBM Cloud Platform, remarcó la importancia de compartir experiencias entre organizaciones: “Lo más valioso es conocer lo que habéis vivido en ese viaje a la nube. Ahí es donde realmente se aprende”.
El modelo propuesto por IBM prioriza entornos interoperables, gobernables y auditables, cumpliendo con las directrices de la Unión Europea en materia de protección de datos y soberanía digital. Además, la compañía ha establecido capacidades específicas para trabajar con sectores regulados, como la región MZR de Madrid, diseñada desde su inicio para cumplir con estos criterios.
Continuidad operativa y cultura de transformación
Más allá de la infraestructura, varios participantes coincidieron en la necesidad de fomentar una cultura organizativa que acompañe el cambio tecnológico. La modernización del sector público no puede depender exclusivamente del área TIC, sino que requiere una transformación transversal que afecte a procesos, normativas internas y modelos de prestación del servicio.
En este contexto, el enfoque híbrido y regulado de la nube pública permite avanzar de forma controlada, manteniendo el equilibrio entre eficiencia operativa y cumplimiento normativo. Las experiencias compartidas durante el evento muestran que una adopción prudente, acompañada de una estrategia clara y socios tecnológicos especializados, puede contribuir de forma significativa a la evolución de los servicios públicos en España.
