
Editor en La Ecuación Digital. Consultor de Innovación y Estrategia…
Apple celebrará su Conferencia Mundial de Desarrolladores (WWDC) el próximo 9 de junio en un contexto marcado por las crecientes dudas sobre su capacidad para competir en el ámbito de la inteligencia artificial generativa. A un año del lanzamiento de su plataforma Apple Intelligence, la tecnológica estadounidense ha avanzado con lentitud frente a rivales como OpenAI y Google, cuyas propuestas han consolidado su liderazgo en el sector.
Según ha informado Bloomberg, los anuncios previstos en esta edición del WWDC estarán centrados en mejoras incrementales, sin la presentación de nuevas arquitecturas o productos que redefinan el posicionamiento de la compañía en IA. En palabras de empleados conocedores de los planes, el evento podría subrayar más las carencias actuales que los avances, alimentando la percepción de que Apple mantiene una estrategia conservadora mientras el resto del sector avanza con rapidez.
Apertura limitada de sus modelos fundacionales
Uno de los anuncios más relevantes será la apertura de los Foundation Models de Apple a desarrolladores externos. Estos modelos, de unos 3.000 millones de parámetros, serán accesibles para su uso en aplicaciones de terceros, permitiendo implementar funciones como resumen de textos o sugerencias básicas. No obstante, su capacidad técnica queda muy por debajo de los modelos en la nube utilizados por compañías como OpenAI o incluso por la propia Apple para servicios internos más complejos.
Esta apertura representa un paso modesto dentro de la estrategia de IA de la empresa. Si bien puede facilitar la integración de funciones inteligentes en el ecosistema de aplicaciones, se trata de modelos optimizados para procesamiento local, con limitaciones en tareas que requieren razonamiento avanzado, generación creativa o análisis contextual profundo.
Reetiquetado de funciones y anuncios secundarios
Apple también aprovechará el WWDC para presentar nuevas funciones reetiquetadas como «impulsadas por IA», aunque sin cambios sustanciales en su tecnología subyacente. Entre ellas figuran una versión actualizada de la app de Traducción —integrada ahora con AirPods y Siri—, un nuevo modo de gestión energética inteligente y algunas mejoras en las aplicaciones Safari y Fotos. Estas últimas recibirán etiquetas de IA, aunque se basan en capacidades ya existentes, como la clasificación automática de imágenes o la generación de sugerencias contextuales.
Este enfoque de marketing técnico —donde el énfasis recae en la percepción y no en el salto tecnológico— ya fue utilizado en 2024 con el lanzamiento de Apple Intelligence, cuando la empresa presentó su plataforma como una IA «para el resto de nosotros». La falta de funcionalidades disruptivas y el retraso en componentes clave, como el nuevo asistente Siri, provocaron críticas generalizadas.
Revisión de nomenclatura para reforzar cohesión de marca
Otra de las decisiones estratégicas que Apple anunciará será la modificación del esquema de versiones de sus sistemas operativos. Abandonará la numeración secuencial tradicional para adoptar una identificación basada en el año, pasando así a iOS 26, macOS 26, iPadOS 26, watchOS 26, tvOS 26 y visionOS 26. Esta decisión busca unificar la imagen de sus sistemas y transmitir una sensación de modernidad y continuidad evolutiva.
La elección del número 26 responde, en parte, a que las nuevas versiones estarán disponibles pocos meses en 2025 —hasta el lanzamiento habitual de septiembre—, y a que el ejercicio fiscal de la compañía para 2026 comienza en octubre. También hay un componente estratégico de imagen: proyectar un enfoque a futuro frente a las crecientes críticas por su escasa ambición tecnológica en IA.
En el caso de macOS, la nueva versión llevará por nombre macOS Tahoe, continuando con la tradición de utilizar lugares icónicos de California. Este rediseño incluirá una nueva interfaz inspirada en el lenguaje visual de visionOS, con mejoras centradas en la experiencia de usuario, aunque sin alterar el modelo de interacción basado en pantallas táctiles y cursores, que ya tiene décadas de antigüedad.
Avances relevantes, pero sin lanzamiento inmediato
En paralelo, Apple trabaja en proyectos de mayor envergadura en materia de inteligencia artificial, pero la mayoría de estos desarrollos no estarán listos para ser mostrados en esta edición del WWDC. Entre ellos destacan:
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LLM Siri: una reconstrucción completa del asistente de voz basada en modelos de lenguaje de gran escala, que pretende ofrecer una interfaz conversacional más natural y funcional. A pesar de su ambición, el proyecto ha acumulado retrasos por problemas técnicos y diferencias internas sobre su orientación.
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Shortcuts con IA: una versión del sistema de automatización que permitirá a los usuarios crear flujos de acciones mediante lenguaje natural, respaldada por modelos propios de Apple Intelligence. Aunque previsto inicialmente para 2025, su lanzamiento podría demorarse hasta 2026.
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Proyecto Mulberry: un asistente sanitario digital basado en IA, vinculado a una nueva versión de la aplicación Salud. El producto, aún en fase de desarrollo, estaría programado para una actualización de primavera en 2026.
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Chatbot Knowledge: una propuesta interna para competir con ChatGPT, capaz de obtener datos de la web abierta. Este desarrollo ha sufrido problemas similares a los de Siri, y su evolución es incierta.
Internamente, Apple ya prueba modelos más avanzados, con hasta 150.000 millones de parámetros, similares a los utilizados por OpenAI. Estos modelos, alojados en la nube, ofrecen resultados más precisos y complejos que las versiones locales. Sin embargo, Apple ha evitado su lanzamiento público por temor a los errores de generación —conocidos como alucinaciones— y por desacuerdos estratégicos entre sus ejecutivos.
Nuevas herramientas para desarrolladores
A pesar de la falta de grandes anuncios en inteligencia artificial, la compañía ampliará la integración de IA en su conjunto de herramientas para desarrolladores. Una de las novedades será la incorporación de un editor de texto enriquecido en SwiftUI, su framework para el diseño de interfaces, así como mejoras en los sistemas de pruebas automatizadas con soporte de IA.
También se espera una actualización sobre Swift Assist, un asistente de codificación que aún no ha sido lanzado oficialmente. La herramienta, diseñada para sugerir y completar código en Xcode, sigue en pruebas internas y utiliza actualmente modelos de Anthropic. Su estado será uno de los puntos clave de la conferencia.
Juegos, rediseños visuales y otros anuncios
En el plano del entretenimiento, Apple presentará una nueva app de juegos que funcionará como reemplazo de Game Center. Este nuevo centro de juegos estará preinstalado en todos los sistemas operativos, ofrecerá acceso a títulos, tablas de clasificación y opciones de comunicación entre usuarios, y podría, en su versión para macOS, soportar juegos adquiridos fuera de la App Store.
Este movimiento responde al interés de Apple por consolidar una presencia más estructurada en el ámbito de los videojuegos, aunque sin alterar sus políticas actuales ni competir directamente con plataformas como Xbox o PlayStation. La app está concebida como un punto de acceso centralizado más que como un canal de distribución alternativo.
Perspectivas para los próximos ciclos
La falta de un anuncio disruptivo en este WWDC pone de relieve la necesidad de Apple de acelerar el desarrollo y despliegue de sus tecnologías de inteligencia artificial. Mientras sus competidores consolidan modelos que permiten búsquedas conversacionales, generación de contenido multimedia y adaptación en tiempo real al contexto del usuario, Apple se limita a avanzar en segundo plano.
La compañía confía en que 2026 marcará un punto de inflexión, con varios productos clave listos para ser presentados. No obstante, posponer sus avances estratégicos en IA implica un riesgo considerable en un mercado donde la velocidad de evolución tecnológica define la competitividad. Para mantener su relevancia en el entorno digital, Apple deberá superar su enfoque gradualista y presentar propuestas más contundentes que conecten de forma tangible con las expectativas del mercado y del ecosistema de desarrolladores.