Los sobrecostes derivados de la inflación constituyen uno de los principales motivos de la ralentización de la industria AEC (Arquitectura, Ingeniería y Construcción) en España.
Aunque los fondos Next-Gen continúan impulsando la obra civil y la rehabilitación de viviendas, en el último año han quedado desiertas casi 2.000 licitaciones públicas según los datos de la Confederación Nacional de la Construcción.
Control en tiempo real
Para poder gestionar con éxito el problema de la inflación y otros riesgos como la carencia de materiales, las empresas del sector AEC están apostando por optimizar sus procesos a través de la tecnología, que aporta múltiples ventajas en términos de movilidad, automatización, supervisión, colaboración y seguridad.
Las tecnologías móviles y cloud mantienen a los equipos sincronizados, con acceso en cualquier momento y lugar a los datos críticos de negocio para controlar los proyectos en tiempo real. Y automatizando los procesos manuales se evitan errores y costes añadidos en horas no productivas.
Además, cuando se utilizan soluciones conectadas, cada vez que variables como los costes de material o las horas de trabajo se ven afectadas, los cambios se actualizan en todas partes indicando automáticamente su impacto en el presupuesto.
Visibilidad, colaboración y seguridad
Los cuadros de mando y las alertas automatizadas constituyen otras herramientas muy útiles para la gestión de riesgos, proporcionando visibilidad sobre situaciones y etapas variables con aviso inmediato a los profesionales adecuados.
Pero ¿por dónde empezar con tantas tecnologías disponibles para distintos problemas empresariales? Una plataforma cloud es siempre una apuesta segura, que debe basarse en APIs abiertas para facilitar la integración con otras soluciones críticas para el negocio.
Las plataformas en la nube también son altamente configurables y pueden abordar cada fase del ciclo de vida de la construcción, constituyendo una base digital sostenible para la evolución de la empresa a largo plazo.
